Asesinaron al único ministro cristiano de Pakistán
INFOBAE.COMShahbaz Bhatti era titular del ministerio de Minorías. Se oponía a una polémica ley que castiga con la pena de muerte a las blasfemias sobre Mahoma. Lo acribillaron talibanes
Según la Policía local, tres hombres armados con rifles Kalashnikov fusilaron a Bhatti cerca de un mercado en Islamabad. Es el segundo alto funcionario acribillado por criticar la Ley de blasfemia. En enero, el gobernador de la provincia de Punjab había sido asesinado luego de criticar duramente la norma y exigir el perdón presidencial para una mujer cristiana sentenciada.
El caso de Asia Bibi, madre de cuatro hijos, reavivó el debate por la ley. Contra lo que suele creerse, la norma no tiene origen en la sharia islámica, sino en la legislación colonial del siglo XIX, cuando se impuso para proteger los lugares de culto. Fue recién durante la dictadura del general Mohamed Zia ul-Haq, en los ochenta, cuando entró en el Codigo Penal que islamizó el Estado paquistaní.
Su texto indica que cualquiera que haga comentarios injuriosos sobre el Islam o sobre el profeta Mahoma merece la pena capital. Sin embargo, su redacción es tan vaga que estuvo en desuso por años. Los juicios por blasfemia son comunes en Pakistán, pero nunca se consumaba la ejecución. Hasta que un juez le sacudió el polvo a ley con la polémica condena a Asia Bibi.
Fuerzas políticas liberales y organismos defensores de los derechos humanos advierten que la legislación sobre blasfemia es peligrosa para las minorías religiosas, poco acostumbradas a la adoración del Islam. Las sentencias, además, suelen basarse en testimonios difíciles de contrastar.
Bhatti, único ministro cristiano del gobierno de Asif Alí Zardari y titular del ministerio de Minorías, militaba por esa causa. Recibió en Islamabad al esposo y a los hijos de Bibi para garantizarles que intercedería ante el Presidente para que perdonara a la mujer, lo que finalmente ocurrió. "Sé que puedo ser asesinado si sigo presionando, pero no tengo miedo", había dicho tras la ejecución del gobernador de Punjab.
La Policía halló panfletos de una facción de los talibanes paquistaníes en la escena del crimen. "Bhatti blasfemo", rezaban los papeles.
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