El buen ejemplo es la mejor manera de fomentar buenos hábitos en los chicos. Las mamás que comen sano logran que sus chicos sigan buenas pautas de alimentación.
Una investigación realizada por la Universidad de Michigan (Estados
Unidos) encontró que adoptar buenos hábitos de alimentación es mucho
mejor que la fuerza, la recompensa y el castigo para que los chicos
sigan una buena dieta. Este estudio fue publicado en la revista American Journal of Clinical Nutrition.
″Las madres deberían dejar de forzar o restringir lo que comen los chicos.
Es mejor generar un ambiente saludable, adoptar hábitos equilibrados de
alimentación y controlar la calidad de la alimentación de los chicos no
trayendo comida poco sana a la casa″, afirma Sharon Hoerr,
nutricionista a cargo del estudio.
La experta explica que no permitir que los chicos coman ciertas comidas
cuando el resto de los comensales sí pueden logra lo opuesto a lo
buscado: hace que los chicos coman más alimentos poco saludables.
Por el contrario, las mamás que eligen alimentos sanos para ellas
mismas sí marcan un rumbo adecuado para los chicos. También logran
buenos resultados cuando persuaden y explican a los chicos la
importancia de comer bien.
CONSEJOS PARA CONVENCER.
″Con los chicos que comen
pocas cosas, es mejor convencerlos y darles ánimo más que gritarles.
Otra manera de hacer que se interesen en los alimentos sanos es
llevarlos a la verdulería o a huertas, y allí ayudarlos a elegir los
productos que van a llevar a casa″, sugiere.
Hoerr también recomienda que los chicos aprendan a cocinar, dejándolos que jueguen mientras preparan los alimentos.
La experta explica que es importante mantener comidas y snacks
regulares, siempre dejando que los chicos decidan las cantidades que van
a comer.
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