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Absurda polémica en torno a los Juegos Olímpicos

INFOBAE.COM

Una agencia de noticias estatal iraní denunció un complot israelí para introducir un mensaje subliminal en el logo de la competencia

Crédito foto: http://www.wolffolins.com/london2012.php

Irán presentó una queja formal ante el Comité Olímpico Internacional y amenazó con retirar a sus atletas de los juegos en caso de que el logo se mantenga inalterado.

El régimen acusa a la imagen, de graficar contenidos racistas. El dibujo ilustra un particular número 2012 compuesto de figuras geométricas, pero que contiene en realidad la palabra ZION.

Este vocablo, o su equivalente en español, Sion, representa la tierra prometida para el pueblo judío. Simboliza un lugar santo con múltiples referencias en los textos bíblicos. Otras religiones como el Rastafarianismo entienden a Sion en forma similar, como un lugar seguro y pacífico para todos los pueblos que buscan un sitio donde poder poblar.

"La utilización de la palabra Zion para elaborar el logotipo de los Juegos Olímpicos de 2012 es un acto totalmente indignante. Desgraciadamente, todos vemos que los próximos Juegos Olímpicos se enfrentan a un gran desafío provocado por el espíritu racista de algunos", se quejó en una carta dirigida al Comité Internacional, Mohammad Aliabadi, presidente del Comité Olímpico iraní.

Además denunciaron la existencia de documentos en Internet que servirían para comprobar la existencia de un complot, aunque no precisaron cuáles. Los organizadores confirmaron haber recibido la misiva y respondieron que lo único que muestra el símbolo es la fecha 2012. También se mostraron sorprendidos por lo tardío del reclamo, ya que la primera presentación fue realizada en 2007.

"Si el COI no toma medidas para resolver esta cuestión, esto podría afectar a la participación en los Juegos Olímpicos de varios países, entre ellos, el de Irán, que insiste en unos ciertos principios y valores", insistió Alibadi.

Esta no ha sido la única acusación que recibió el logo de la competición. Su diseño costó una cifra cercana a los 650 mil dólares, y desde que se hizo público recibió sendas críticas. Se le imputó también asemejarse a una cruz esvástica y a un acto sexual.

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